Tomar la decisión de renunciar a un trabajo puede ser complicado y muy estresante, especialmente si no tiene experiencia en este proceso. La ley de California indica que un trabajador puede renunciar a un empleo en el momento que este desee, sin enfrentar ningún problema o consecuencia. Sin embargo, en caso de contar con un contrato de tiempo definido, renunciar antes de que el periodo determinado termine si puede traer algunas consecuencias.
Cuando toma la decisión de presentar su renuncia, generalmente es recomendable avisar a su empleador con al menos 2 semanas de anticipación. Esto es con el propósito de que este tenga oportunidad de encontrar a su remplazo, así como encargarse de los trámites necesarios. Pero, es importante destacar que este tiempo anticipado no está estipulado por la ley. Por lo tanto, usted podría renunciar en el momento que crea conveniente y dejar de trabajar en la empresa sin tener un problema legal.
En caso de haber notificado a su empleador con al menos 72 horas de anticipación, en su último día de trabajo, este deberá pagarle por los días trabajados que aun estén pendientes. Por otra parte, en caso de que no haya proporcionado un aviso con tiempo, su empleador deberá realizar su pago final dentro de las 72 horas siguientes a su último día laboral. Si este no es el caso, y su empleador no le ha pagado después de 72 horas, este podría sufrir consecuencias. Las consecuencias pueden ser monetarias, e irán creciendo lo equivalente a un día de su salario por cada día que su empleador se retrase.
Finalmente, es importante saber que después de renunciar a su empleo seguirá contando con derecho a comenzar un reclamo en caso de que sus derechos hayan sido violados. Este reclamo tendrá la misma validez sin importar su renuncia.
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